SAN PEDRO DE MACORÍS, R.D. (VIPRENSA).- El obispo de la
Diócesis de San Pedro de Macorís y Hato Mayor, monseñor Santiago
Rodríguez, dijo que es alarmante el alto índice de delincuencia que
está presente en todos los sectores y extractos sociales y que
afecta a todo el territorio nacional.
Entiende que esta es una delincuencia “forzada” porque muchas
personas para sostener vicios cometen atracos, robos y otros actos
delictivos y, consideró que este tipo de delincuencia es fruto de
una necesidad de poder solventar no solo la alimentación, sino esos
vicios.
Sostuvo que hay muchas personas que no trabajan pero que quieren
usar modas y otras cosas lo que lo lleva a delinquir y, otros porque
se constituyen en estructura (banda) y que esto es aún más
peligroso, otros forman parte de una estructura social en que la
misma sociedad por la falta de oportunidad y situaciones lleva a la
persona a cometer hechos delictivos.
Monseñor Rodríguez entiende que ninguna de esas situaciones
justifica que se tenga que agredir o quitarle sus pertenencias al
ciudadano.
Denunció que recientemente la diócesis de aquí fue víctima de robo,
lo que consideró algo deprimente y lamentable, por lo que no se
puede permitir que estas acciones se sigan produciendo.
El prelado católico exhortó a la Policía Nacional, que es la
responsable principal, seguir atacando firmemente a los delincuentes
y que a su vez la justicia haga también su trabajo, ya que esto no
es solo tarea de la Policía, sino también del Ministerio Público.
Dijo conocer de casos donde la Policía hace su trabajo identificando
al delincuente y recibe las quejas, pero que muchas veces el
Ministerio Publico no cumple con su rol por varios factores.
Pidió a ambas instituciones seguir haciendo su trabajo y, que la
ciudadanía continua reforzando los valores en la familia a fin de
contrarrestar este mal que mantiene al “grito” a la población en
todo el territorio nacional.
El líder católico señaló que una muestra de esto es la cantidad de
personas que acuden diariamente a los destacamentos policiales a
presentar denuncias de robo y atracos, lo que calificó de
preocupante.
“Esto es una alerta, no podemos seguir así, no podemos darle tregua
a la delincuencia, hay que poner mano dura y firme contra los
delincuentes ya este mal está castigando al país”, expreso el obispo
de la diócesis de San Pedro de Macorís y Hato Mayor.
Manifestó que nunca estará de acuerdo que un grupito ponga en
zozobra a una comunidad y tenga el poder y el control de una sana
convivencia en nuestra sociedad, por lo que entiende que tanto la
Policía como el Ministerio Público deben atacar este mal.
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