Obispo de S.P.M. denuncia haitianos indocumentados son maltratados y extorsionados a la hora de ser apresado
Por Iván Santana
Publicado el 28 de noviembre de 2024.
SAN PEDRO DE MACORÍS, R.D.
(VIPRENSA).- El obispo de la Diócesis San
Pedro de Macorís y Hato Mayor, monseñor Santiago Rodríguez,
consideró que es antihumano como las autoridades de Migración y
la Policía Nacional llevan a cabo las deportaciones de los
haitianos indocumentado, los cuales son despojados de sus
pertenencias, extorsionados y muchas veces maltratados
físicamente.
El obispo Rodríguez habló en esos términos al participar como
invitado en el programa, Resumen Sabatino con Iván Santana, que
se transmite los sábados de 9 a 10 de la mañana por la emisora
digital Viradio.com.do.
Indicó que ha sido testigo en varias ocasiones de que en las
deportaciones se está actuando de forma incorrecta, ya que ese
ciudadano tiene su derecho, por lo que entiende que aunque está
violando una ley, esa persona debe recibir un trato humano y que
se le dé el tiempo oportuno para que recoja su pertenencias.
“Creo que esos extranjeros no deben ser maltratados con
empujones, ya que su delito es que no tiene documentos, pero que
eso no lo lleva a ser una víctima donde la Policía lo maltrate
físicamente y lo entren en el camión en peores condiciones que
los animales” señaló el prelado católico.
Dijo que el problema no es la deportación, sino el negocio, la
forma cruel, la mafia, el maltrato y la extorción a que son
sometido los nacionales haitianos, por lo que entiende que ahí
es donde las autoridades de Migración deben de actuar y corregir
esas acciones bochornosas y antihumana.
Expresó que en días pasados apresaron a una monja nigeriana
luego de confundirla con una haitiana, la cual solo habla el
idioma Francés y pedía ayuda, pero que los agentes policiales le
hacían la propuesta de que le podía pagar sosteniendo relaciones
sexuales y, que ella reveló que esa misma propuesta se la hacían
a las mujeres de otras nacionalidades luego de ser detenidas.
Reitero que está de acuerdo con las deportaciones, ya que la
Republica Dominicana no puede hacerse cargo del peso social y el
desorden que vive Haití, pero que el modo operandi que utilizan,
sigue siendo muy deficiente y lo atribuye a la falta de un
patrón que dirija y tenga sanción y deje de ser un negocio, por
lo que entiende que ahí debe iniciar la reforma de esas
estructuras malsanas de “dame lo mío”.